Desde muy niña conocí varias iglesias; sin embargo, entendí el sacrificio de Cristo en la cruz por mí a los 14 años. Recuerdo que fue un 28 de febrero del 2008 y mi vida empezó a cambiar mucho. Desde que conocí a Cristo, quería que Dios usara mi vida como misionera, pero entendía que debía terminar la escuela y luego prepararme para servirle a tiempo completo.

En 2012 llegué a PDV Panamá como equipante y allí, viendo el ministerio y lo que cada misionero hacía, descubrí que podía servir a tiempo completo en mi país. Ese mismo año, en abril, fui a estudiar en la Escuela de Evangelismo y Discipulado en PDV Panamá y Mirko me habló del Instituto para seguir preparándome. Oré por 2 años y en 2015 viajé a México para estudiar los 3 años de Instituto Bíblico. Regresando a Panamá ya quería servir a tiempo completo, pero Dios fue guiando mis pasos y mostrando el tiempo correcto. En 2020 me integré como colaboradora al equipo y el 26 de mayo del 2023 Dios me permitió ser oficialmente misionera de Palabra de Vida Panamá. ¡Dios es bueno!